El 17 de abril de 2013 se produjo un incendio en las instalaciones de West Fertilizer Company, una empresa dedicada al almacenamiento y distribución de fertilizantes, productos químicos, semillas y equipos agrícolas. Treinta toneladas de nitrato de amonio detonaron, causando una explosión masiva. Como consecuencia, en el terrible accidente murieron 15 personas (12 bomberos voluntarios y 3 ciudadanos) y hubo más de 260 heridos, las instalaciones de West Fertilizer quedaron completamente destruidas y las infraestructuras cercanas (viviendas, colegio, instituto, residencia de ancianos, comercios, etc.) sufrieron importantes daños.
Se puso de relieve una falta de concienciación: mala ordenación del territorio en los años anteriores al accidente y subestimación del riesgo que entrañaba almacenar nitrato de amonio en contenedores combustibles de madera, por parte de las autoridades locales, aseguradoras y órganos asesores. Las medidas de prevención, protección y supervisión resultaron completamente inadecuadas e insuficientes.
Además, los servicios de emergencia no estaban preparados ni habían realizado formación para realizar intervenciones con productos químicos. Por ello, el CSB publicó una serie de recomendaciones para tratar de evitar hechos similares en el futuro.
El vídeo incluye una animación en 3D donde se pueden ver las diferentes etapas del accidente, así como entrevistas a distintos miembros del CSB que participaron en la investigación.